Nos sorprendería si «Limpiar mi cepillo» encabezara tu lista de cosas por hacer. Probablemente ni siquiera está en tu lista de cosas por hacer. Limpiar el cepillo no es exactamente algo que puedes hacer fácilmente mientras miras TV o te relajas en una cena a la luz de las velas. Sin embargo, nos animamos a decir que de vez en cuando miras el cepillo y ves cosas que preferirías no ver.
Si le prestas atención al estado de tu cepillo, el punto es que un cepillo limpio probablemente dé más resultados deseados que una obstrucción en los mechones de cabello y el residuo de los productos. ¿Por qué usar un cepillo sucio luego de haber lavado tu cabello con champú y acondicionador?
También es importante tener en cuenta que es fundamental mantener una buena higiene para la salud y el bienestar general, y eso incluye el cabello. Mantener limpio el cepillo es una manera de prevenir, similar a lavarte las manos.
La buena noticia es que cuanto más a menudo limpias los cepillos para el cabello, más fácil será y mejores serán los resultados. Aquí te explicamos brevemente cómo limpiar un cepillo y mantenerlo listo para un rendimiento máximo.
Paso 1: Retira el cabello del cepillo
Tal vez te preguntes cuánto cabello se atoró en las cerdas, y cómo retirarlo. Tranquila, tenemos la respuesta.
Cepillos planos: Una peineta funciona de maravilla. Colócala en la parte inferior de las cerdas del cepillo y pásala hasta que puedas elevar y retirar el cabello. Gira el cepillo y repite hasta que lo retires. El extremo de una peineta de cola entre las cerdas también puede ayudar a aflojar el cabello. Usa una peineta de la misma manera para cepillos planos con cerdas con bolas en las puntas y ampliamente espaciadas.
Cepillos redondos: Afloja el cabello en varios lugares colocando un objeto cónico angosto entre el mechón de cabello y la base de las cerdas. (Hemos escuchado hablar de bolígrafos, lápices, punzones, picahielos y destornilladores delgados – sin embargo, nosotros recomendamos el extremo de una peineta cola de rata.) Usa unas tijeras pequeñas para cortar el cabello aflojado entre las filas de cerdas y tira hacia afuera. No se te hará difícil desenmarañar el enredo si primero cortas los cabellos.
Paso 2: Quita la suciedad del peine con agua
Ahora que puedes ver la base de las cerdas, es hora de pasar al siguiente nivel de limpieza. Sabemos qué hay: polvo, pelusas, acumulación de residuos, oleosidad y caspa. Eso no es lindo.
Llena el lavabo limpio o un bol grande con agua tibia. Agrega una gota de champú clarificante (también puedes usar champú para bebés, jabón de Castilla líquido u otro champú transparente). Enjuaga y agita para que forme espuma.
En esta etapa el tipo de cepillo para el cabello es importante:
- Cepillos plásticos o metálicos/plásticos: Sumérgelos en el agua jabonosa durante 3 minutos.
- Cepillos con protector de tela/suave en la base: Sumérgelos en el agua jabonosa sin mojar el protector. Sumerge, agita. Sumerge, agita.
- Cepillos de madera: Haz lo mismo que arriba. Sumerge, agita. Sumergir un cepillo de este tipo podría arruinar la madera y el acabado.
- Cepillos de cerdas naturales: Dependiendo del material del mango y la base, no hay problema si lo remojas por unos minutos. Muchos cepillos de cerdas naturales tienen base y mango de madera; en ese caso, límpialo como lo harías con uno de madera.
Luego de enjabonar y remojar, enjuágalo bien en agua tibia y observa cómo luce. Si luce bien, continúa al Paso 3. Si no estás conforme con los resultados, frota el cepillo y la base con un cepillo de dientes suave y limpio para retirar lo que haya quedado. Enjuaga nuevamente.
Paso 3: Seca el cepillo
Sécalo con un paño limpio y seco y agítalo sobre el lavado para eliminar el exceso de agua. Todos los tipos de cepillo requieren limpieza, pero la manera en que los secas depende del tipo (sin mencionar el clima).
- Cepillos plásticos o plásticos/metálicos: Colócalos boca abajo sobre una toalla limpia y seca y deja que se seque al aire durante la noche.
- Cepillos con protector de tela/suave en la base: si vives en un clima seco, puedes colocarlos boca abajo sobre una toalla limpia y seca para que se sequen al aire durante la noche. Si es húmedo, te recomendamos usar el secador de cabello y así evitar que se produzca moho.
- Cepillos de madera: En un clima seco, deberían secarse bien durante la noche. Prueba colgándolo del cabezal de ducha para que el aire se desplace libremente a través de las cerdas estrechas. Cuando hay mucha humedad, usa el secador de cabello en un ajuste bajo para quitar la humedad antes de colgarlo.
- Cepillos de cerdas naturales: Similar a los cepillos de madera, necesitan mucho flujo de aire para secarse. Colgarlo es lo mejor, sin embargo, puedes colocarlo sobre una toalla limpia y seca con bajo nivel de humedad, durante la noche. Cuando está muy húmedo, secarlo con el secador de cabello en un ajuste bajo acelerará el proceso y evitará el moho.
No olvides limpiar el cepillo regularmente
Para evitar la acumulación de residuos y facilitar la limpieza, asegúrate de enjuagar o limpiar rápidamente los cepillos una vez por semana. Toma conciencia y seguramente solo necesitarás limpiarlos en forma profunda una vez al mes.
Y no restrinjas la limpieza a las cerdas y los tubos. El polvo, la suciedad y el residuo de los productos también pueden acumularse en los mangos, de modo que recuerda limpiarlos.Ya sea que limpies tu cepillo para alisar el cabello, tu cepillo de madera o tu cepillo desenredante favorito, o de cualquier otro tipo, sacarás el máximo provecho si los mantienes limpios.