El médico realizará un examen físico, buscará signos y síntomas de gripe, y es probable que pida un análisis que detecte los virus de esta enfermedad.
Durante los períodos en que la gripe es común, es posible que no sea necesario un análisis para detectarla. El médico puede darte un diagnóstico en función de tus signos y síntomas.
En algunos casos, el médico puede sugerir que te hagan una prueba para detectar la gripe. Puede usar distintas pruebas para diagnosticarla. La prueba de la reacción en cadena de la polimerasa (RCP) es cada vez más común en muchos hospitales y laboratorios. Esta prueba puede hacerse en el consultorio del médico o en el hospital. La prueba de RCP es más sensible que otras pruebas y puede identificar la cepa de la gripe.
Es posible hacer una prueba para diagnosticar tanto la influenza como la COVID-19. Es posible tener COVID-19 y gripe al mismo tiempo.
Tratamiento
Generalmente solo necesitarás descansar y tomar mucho líquido para tratar la gripe. Pero si tienes una infección de gravedad o tienes un mayor riesgo de tener complicaciones, el médico quizás te recete un medicamento antiviral para tratar la gripe. Estos medicamentos pueden incluir oseltamivir (Tamiflu), zanamivir (Relenza), peramivir (Rapivab) o baloxavir (Xofluza). Estos medicamentos pueden acortar aproximadamente un día la enfermedad y ayudar a prevenir complicaciones graves.
El oseltamivir es un medicamento oral. El zanamivir se inhala a través de un dispositivo similar a un inhalador para el asma y no debe usarlo ninguna persona que tenga ciertos problemas respiratorios crónicos, como asma y enfermedades pulmonares.
Los efectos secundarios de los medicamentos antivirales pueden incluir náuseas y vómitos. Estos efectos secundarios pueden hacerse más leves si el medicamento se toma con alimentos.
La mayoría de las cepas de influenza que circulan se han vuelto resistentes a la amantadina y rimantadina (Flumadine), que son medicamentos antivirales más antiguos y que ya no se recomiendan.
- Oxigenación por membrana extracorpórea
Modo de vida y remedios caseros
Si te contagias de la gripe, estas medidas pueden ayudar a aliviar los síntomas:
- Bebe mucho líquido. Elige agua, jugo y sopas calientes para prevenir la deshidratación.
- Descansa. Duerme más para ayudar al sistema inmunitario a combatir la infección. Quizás tengas que cambiar tu nivel de actividad, dependiendo de los síntomas.
- Considera tomar analgésicos. Toma analgésicos de venta libre para aliviar el dolor, como acetaminofén (Tylenol u otros) o ibuprofeno (Advil, Motrin IB u otros), para combatir los dolores asociados a la influenza. Los niños y adolescentes que se están recuperando de síntomas como los de la influenza nunca deben tomar aspirina por el riesgo del síndrome de Reye, una afección poco común pero posiblemente mortal.
Para ayudar a controlar el contagio de la influenza en tu comunidad, quédate en casa y haz que los niños que estén enfermos se queden en casa hasta 24 horas después de que la fiebre haya desaparecido. Evita estar con otras personas hasta sentirte mejor, a no ser que vayas a recibir atención médica. Si necesitas salir de casa para recibir atención médica, ponte una mascarilla. Lávate las manos con frecuencia
