El aguacate es uno de los consentidos de la cocina mexicana, de eso no hay duda; pero algunas veces puede ser complicado de integrar a las comidas en su versión guacamole, ¡hasta que hacemos salsa de aguacate!
Cremosa, refrescante y deliciosa; perfecta para dijera y acompañar los platillos del desayuno, comida y cena. Lo mejor es que la salsa de aguacate es súper fácil de hacer y los ingredientes que utiliza, seguro ya los tienes en casa.
Ingredientes
- 5 tomates lavados sin cáscara y cortados
- 2 chiles jalapenos troceados
- 1 trozo cebolla
- 1/2 ajo
- 6 ramitas cilantro
- 1 aguacate troceado
- al gusto Sal y agua
Pasos
- Pica los aguacates en pedazos medianos y coloca todos los ingredientes en la licuadora. Mezcla hasta que se incorporen de manera homogénea y la consistencia sea cremosa.
- Sirve y usa de inmediato o refrigera hasta el momento de servir.
SALSA DE AGUACATE: TIPS PARA PERSONALIZARLA
- Como seguro sabes, el éxito de las salsas mexicanas tienen mucho que ver con el comensal, por eso puedes personalizarlas a tu gusto y aquí te dejamos algunos tips que te ayudarán a hacerlo:
- Aumenta el jugo de limón para un sabor más acidito, de 2 a 4.
- Cambia el tipo de chile que utilizas. Si buscas una salsa más picante puedes utilizar chile serrano en lugar de chile jalapeño. Comienza con 2 chiles y prueba antes de agregar más.
- Cambia el aceite. Si el aceite de oliva no es tu preferido para esta receta, sustituye por aceite de aguacate.
- Elimina el aceite. Si quieres que la salsa sea más fresca, puedes eliminar el aceite por completo o sustituirlo por 1/4 taza de yogur griego sin sabor (no dulce) para hacerla la salsa más cremosa.
- Sustituye el comino. Si este ingrediente es muy fuerte para tu gusto, puedes cambiarlo por media cucharada de consomé de pollo en polvo.
- Agrega textura. Puedes servir dentro de la salsa 2 cucharadas de cebolla picada en cuadritos para agregar una textura, y sabor, extra a la salsa
- Fuente Comedera.com
